El Xerez logró una trabajada victoria por 1-0 frente al Alcoyano gracias a un gol en el último tercio del partido del sevillano José Mari Romero, que aleja a los jerezanos de la zona de peligro y, en cambio, mete en problemas al conjunto alicantino, que se queda a solo tres puntos del descenso.
Los andaluces confirmaron su mejoría con su segundo triunfo seguido, mientras que los de Alcoy, tras ganar a la UD Las Palmas, vuelven a caer y sólo han sumado cuatro puntos en las cinco últimas jornadas.
En la primera media hora apenas hubo llegadas a la portería contraria y hubo que esperar al minuto 33 para ver sendas oportunidades de gol, una para cada equipo. El xerecista Cordero habilitó a José Mari a la espalda de la defensa, pero el ariete sevillano, mano a mano con Maestro, ajustó demasiado su disparo raso al poste izquierdo y lanzó fuera.
Respondió el Alcoyano con un gran disparo desde la frontal de Gato, que obligó a Doblas a estirarse para enviar el balón a córner.
En los instantes postreros de la primera mitad pudo adelantarse el Xerez por dos veces, la primera en el 39, cuando Lombán botó un libre directo a la escuadra que Maestro salvó al desviar a córner.
Además, justo antes del descanso, el cancerbero del Alcoyano despejó mal y el balón le llegó a Pablo Redondo, pero su remate lo rechazó Carrión bajo palos.
La segunda mitad comenzó con una ocasión para el Alcoyano. Gato recibió a la espalda de los centrales y dejó el balón a Guille Roldán, cuyo disparo se marchó alto.
Ya con el ex bético Capi en las filas locales, al sustituir a Capdevila, en el minuto 66 llegó la segunda gran oportunidad de gol para José Mari. Pablo Redondo sirvió dentro del área al sevillano, pero volvió a encontrarse con Maestro, que rechazó milagrosamente.
Sin embargo, a la tercera fue la vencida. Corría el minuto 72 cuando Capi cedió a Íñigo Vélez entre líneas, que dejó el esférico a la espalda de la defensa a José Mari, quien esta vez no falló en el mano a mano para hacer el 1-0 a la postre definitivo.
En dos minutos, 80 y 81, Cañadas tuvo el empate para el Alcoyano: primero, en una falta lateral que despejó de puños Doblas; y luego, en una vaselina dentro del área que salió rozando el larguero.
Pudo sentenciar en el 84 el Xerez con un disparo de Pablo Redondo tras un servicio de Vélez, pero rebotó en un defensa y el esférico se marchó a córner, en una fase final en la que el choque estaba abierto, pero el marcador ya no varió.
